San Lorenzo y el Día del Minero

10 Agosto 2009
Son muchos los chilenos y chilenas que hoy se identifican con San Lorenzo, puesto que aunque no se trata -esta vez- de los tesoros de la iglesia, sino de Chile y sus recursos naturales... Por Pedro Marín
Pedro Marín >
authenticated user Corresponsal

A pesar de ser escasos los antecedentes biográficos que se tienen acerca de San Lorenzo, considerado por muchos como el patrono de los mineros por haber ocultado bajo tierra los bienes materiales -abundantes en metales preciosos- de la iglesia; demostrando su valor con la cual se enfrentó sin ningún temor al poder del emperador Valeriano, tal y como los mineros se enfrentan día a día a las implacables fuerzas de la naturaleza, así como también al esfuerzo y rigor intrínseca a la labor minera.
A San Lorenzo fue el primer diácono de la Iglesia de Roma durante el Papado de Sixto II. También se ha logrado establecer que tenía bajo su responsabilidad, velar por los bienes de la iglesia.
En aquel entonces, Valeriano, al igual que sus predecesores en su cargo, se caracterizaba por su codicia y un desarrollado sentido del poder. Según la leyenda, Valeriano concibió la idea de apoderarse de los tesoros de la iglesia -abundantes en oro y plata- e hizo apresar a Lorenzo para que se los cediera. Sin embargo, el futuro santo a pesar de estar consciente de que su vida corría peligro, solicitó tres días para reunirlos, argumentando la cuantía de los mismos. Tiempo que dedicó a esconderlos del tirano emperador enterrándolos bajo tierra.
Cuando el Emperador se enteró de que había sido burlado por Lorenzo enloqueció de rabia y decidió un castigo ejemplar condenándolo a morir en una parrilla ardiente. A pesar de la horrible sentencia, se dice que San Lorenzo permaneció sereno y nunca reveló el lugar donde había escondido el codiciado botín.
Emulando la historia, son muchos los chilenos y chilenas que hoy se identifican con San Lorenzo, puesto que aunque no se trata -esta vez- de los tesoros de la iglesia, sino de Chile y sus recursos naturales (oro, plata, níquel, molibdeno, azufre, etc.), lo cuales son altamente apetecidos por otros gobiernos más poderosos. Quizás y debido a los evidentes cambios sociales, culturales y tecnológicos ya no podemos esconderlos como sucedió con Lorenzo, pero como Federación Minera de Chile, si podemos hacer un llamado a la conciencia de nuestros gobernantes, de los parlamentarios y porqué no, de la propia iglesia y, así parar esta depredación descomunal de nuestros tesoros.
Así mismo, asimilar esta analogía como un aprendizaje para todos los mineros y mineras de Chile y en particular de todos los trabajadores socios de esta gran organización sindical, que pretende una retribución más justa de los bienes dados por el creador para todos los hombres libres y valientes de esta delgada y larga franja de tierra, llamada Chile. Un saludo y un gran abrazo.
Foto/Flickr: il_arrivederci

Contenidos que pueden interesarte

No existen contenidos para esta sección.