Hasta hace un par de meses, no tenía idea de la señorita Amy X Neuburg ni de su banda. Gracias a uno de los extraños blogs en lo que suelo bucear para buscar nuevas maravillas musicales, es que me encontré con esta chica que compone, canta y toca varios instrumentos, que desde hace más de diez años toca bajo el nombre de Amy X Neuburg & Men y que en sus composiciones, lideradas siempre por su límpida voz, mezcla loops, samples, opera, rock, música medieval y sonidos étnicos que dotan a sus discos de un sonido más que atractivo y seductor.

En su página web, Amy es definida como una artista que ha forjado "una carrera única tendiendo puentes entre las fronteras de lo clásico, los experimental y la música popular. Sus salvajes y entretenidas canciones avant cabaret que combinan sus intereses en el lenguaje y el teatro, el uso expresivo de la tecnología musical y la exploración de múltiples géneros usando los muchos colores de su rango vocal en cuatro octavos" ¿Qué tal?

Hecha esta introducción, también debo contarles que su discografía propia comienza en 1993 y que no son muchos los álbumes de los que es autora, aunque sus colaboraciones con otros músicos son incontables. Para deleitarlos en esta jornada, me atreví a elegir su disco Utechma, primero con sus "hombres", que data de 1995 y en donde podemos percibir el talento de esta chica.

El disco comienza con una pieza de construcción compleja titulada Chinatown, que no deja de rememorar a la genial Laurie Anderson. Con toques del siempre desfachatado avant garde, el tema se desliza como una pieza sumamente atrapante. Poco más adelante, nos encontramos con una faceta completamente diferente de Miss Neuburg con el tema Into that Hole, una pieza que nos recuerda lo experimental que puede ser el pop basado en sintetizadores, con algunas sencillas pero flotantes escalas en guitarra y que poco a poco va sumando sonidos hasta convertirse en un pequeño épico. Delirium es, derechamente, una canción que encantará a los fanáticos de Laurie y de Tori Amos. Samplers de coros, una base rítmica sencilla pero atractiva forman parte primordial de esta canción que es una verdadera delicia. Esta tendencia continúa con Get that Camera out of Here, aunque en la medida que el tema avanza, se convierte en una pieza extraña, juguetona, llena de exquisitos detalles y figuras musicales que desembocan en coqueteos con algunas armonías orientales y la confluencia de diversos ritmos y sonidos.

Fish es una pieza deliciosamente experimental y oscura, al igual que Tango, que vuelve a repetir el coqueteo de Amy con el avant garde, experimentado sobre la base rítmica del tango en una pieza que dibuja un complejo paisaje sonoro y que desemboca en una sorprendente última secuencia. Aunque en Money in the Skyvolvemos a encontrarnos con una pieza más sencilla (por decirlo de algún modo), estoy seguro que los fanáticos de King Crimson en su época ochentera adorarán el sonido de la guitarra y muchos de los pasajes de esta canción. My Empire retoma la senda de Tango y Money in the Sky al mezclar diversas texturas musicales en escasos minutos que viajan de un sonido casi de cabaret hasta secciones casi progresivas.

Para terminar, el alucinante tema que da nombre al disco, en donde otra vez se mezclan géneros y sonidos siempre liderados por la voz de Amy, y la flotanteHunger for Heaven, una pieza exquisita y delicada que cierra el disco plácidamente.

Me parece que ya he mencionado todas las características por las que usted debe escuchar este disco. Arriésguese a escucharlo porque en él encontrara decenas de texturas que hacen de este álbum una pieza interesante, entretenida y como ya lo dije, sumamente seductora para cualquier oído hambriento de una dosis de frescura musical.