La necesidad urgente de generar un proyecto de nuevo cementerio para Antofagasta planteó el diputado por el IV Distrito, Manuel Rojas. El parlamentario aseguró que el actual campo santo administrado por la Municipalidad está colapsado, situación que está obligando a los antofagastinos de menos recursos a pagar altas sumas de dinero en un parque privado.

“Hoy más que nunca –tras la fiscalización realizada por la seremi de Salud donde se detectaron una serie de irregularidades-, queda en evidencia la necesidad urgente de que la Municipalidad se ponga a trabajar en un proyecto para dotar a la ciudad de un nuevo cementerio. El actual campo santo está colapsado hace varios años y sólo se han implementado soluciones de parche que no logran absorber la real demanda de nichos que hay en la ciudad”, sostuvo el parlamentario.

Rojas aseguró que la administración municipal debe anticiparse y evitar una situación de emergencia. “Este es un tema que vengo planteando desde hace mucho tiempo. Si el actual cementerio no da abasto para nuestra actual población ¿qué sucederá en los próximos años, cuando la potente inversión minera proyectada para la zona traiga a la zona a miles de trabajadores para radicarse en la ciudad?”, dijo.

Asimismo, Rojas expuso la necesidad de que el Gobierno a través del ministerio de Bienes Nacionales entregue un terreno para materializar un proyecto de estas características.

COSTOS

En la actualidad el Cementerio Municipal ofrece una acotada disponibilidad de nichos y ya no existe la opción de sepultura en tierra. Según la administración, estos cupos se abren esporádicamente y están destinados a suplir la demanda inmediata, sin posibilidad de compra para el futuro.

Este escenario –según Rojas- está provocando un problema social y económico considerable. Las familias de menos recursos deben incurrir en gastos significativos para su realidad económica. “El nicho más barato en el cementerio privado de la ciudad cuesta $ 700 mil, lo que se transforma en una tremenda carga para las familias que además deben solventar otros gastos como los de la funeraria y probablemente también los costos médicos que dejan a las familias de menos recursos no sólo con el dolor inmenso que significa la pérdida de un ser querido, sino también como una enorme deuda”, aseguró.