creo que Mario fue un pampino de corazon un grande entre los grandes, siempre dijo que aprendio del maestro, sin nunca sentir que el lo era.
Hoy mañana y pasado me lo encontrare en el desierto, y cuando contemple un cerro en un atardecer, seguro que vere su sonrisa, y cuando el viento susurre en mi oido sentire su voz profunda y sinigual
Ahora los sabados ¿quien sera capaz de llenar el vacio de opinion reflexion y testimonio en la estrella del norte, como no recordar aquellos articulos en el mercurio, durante decadas, se fue un grande que hoy vaga en el desierto en busca de los sueños de la pampa que siempre abrigo.
Perdon por no haberlo despedido ayer como correspondia, pero mi alma y mi corazon alli estuvieron
y copiando a un joven escritor Eduardo Salinas Olave "cuando olvidamos es cuando las cosas realmente desaparecen y dejan de pertenecer a este mundo"
Antofagasta no tiene intenciones de olvidarte, te entregó en vida el ancla de oro y muchos de nosotros nuestra admiracion y cariño
estimada familia,
estimada familia, Teresita
creo que Mario fue un pampino de corazon un grande entre los grandes, siempre dijo que aprendio del maestro, sin nunca sentir que el lo era.
Hoy mañana y pasado me lo encontrare en el desierto, y cuando contemple un cerro en un atardecer, seguro que vere su sonrisa, y cuando el viento susurre en mi oido sentire su voz profunda y sinigual
Ahora los sabados ¿quien sera capaz de llenar el vacio de opinion reflexion y testimonio en la estrella del norte, como no recordar aquellos articulos en el mercurio, durante decadas, se fue un grande que hoy vaga en el desierto en busca de los sueños de la pampa que siempre abrigo.
Perdon por no haberlo despedido ayer como correspondia, pero mi alma y mi corazon alli estuvieron
y copiando a un joven escritor Eduardo Salinas Olave "cuando olvidamos es cuando las cosas realmente desaparecen y dejan de pertenecer a este mundo"
Antofagasta no tiene intenciones de olvidarte, te entregó en vida el ancla de oro y muchos de nosotros nuestra admiracion y cariño
al olvido nuestro no pasaras