¿Sabía que en el Muelle Melbourne y Clark, se registró el 14 de febrero 1879 el desembarco de las tropas chilenas, que marcan el inicio de la Guerra del Pacífico? Y que de ese hecho, precisamente, nace la importancia de aquel embarcadero para la historia de nuestro país y especialmente de nuestra ciudad.

No por nada, la re apertura a la comunidad, se fijó precisamente para hoy 21 de mayo, fecha en que conmemoramos un año más de aquel combate de Iquique, en que nuestro Capitán Arturo Prat se inmolara por amor y compromiso a Chile.

La ceremonia, que tendrá lugar luego del tradicional desfile que se realiza en conmemoración de las Glorias Navales, contará con la presencia de autoridades regionales e invitados especiales encabezados por el Intendente Regional, Valentín Volta.

Al respecto, la máxima autoridad regional destacó que la restauración y puesta en valor de este embarcadero, es un regalo para la ciudad, que le cambiará el rostro al Barrio Histórico, transformándolo en un polo de atracción por las actividades que se generaran en dicho lugar.

En tanto el Secretario Regional Ministerial de Obras Públicas, César Benítez  hizo una invitación a la comunidad, para que concurran a presenciar este muelle, que es parte de la historia de Antofagasta, que será inaugurado oficialmente a fines de mes, con la presencia del ministro de la cartera Alberto Undurraga.

Restauración

Entre sus características destacan los mil 900 metros cuadrados de madera de roble que forma el piso, con espacios de vidrio que ha sido denominados ventanas del tiempo y que permiten observar su antigua estructura, a lo que se agregan barandas, una chaza deportiva para actividades náuticas, un sombreadero y bancas.

Asimismo se han mantenido las antiguas grúas y cabría, con que contaba el muelle en sus inicios, y que le permitían desarrollar las diversas actividades. Además se ha instalado un sistema de iluminación que permite realzar sus características, como los 28 focos que fueron ubicados en las grúas, y las cintas con luces leds, hacen resaltar su estructura.

Su administración estará a cargo de la Corporación Cultural PAR, que será la encargada de programar las diversas actividades que se desarrollara, la cual tendrá como socio estratégico a la Fundación Ruinas de Huanchaca.

Algo de historia

Su construcción se inicia en 1872, por la compañía salitrera Melbourne Clark, a fin de levantar el primer muelle de carga para el transporte del salitre de la ciudad. Si bien su inauguración fue en 1880, un año antes, el 14 de febrero de 1879 fue mudo testigo de un hecho que luego sería un verdadero hito en la historia de la Guerra del Pacífico: el desembarco de las tropas chilenas comandadas por el coronel Emilio Sotomayor.

En mayor de 1885 su nombre es cambiado a muelle oficial de la Compañía de Salitres y Ferrocarriles de Antofagasta, tras ser traspasado a la Minera de Huanchaca de Bolivia, Tres años más tarde, en 1888 pasó a manos de The Antofagasta and Bolivia Railway Co. Ltda. 74 años después, en 1962 pasa a ser administrado por la Corporación de Fomento (CORFO).

Fue declarado Monumento histórico nacional el 12 de julio de 1978, sin embargo y pese a tan honorífico título su licencia fue traspasada de una empresa a otra por varios años, hasta que el 2000 debido al deterioro que presentaba la centenaria construcción, las autoridades de entonces decretan su cierre.

El proyecto de su restauración partió el año 2013, a cargo del Ministerio de Obras Públicas, y por fin hoy 21 de mayo de 2015, los antofagastinos volvemos a recuperar un espacio que es una verdadera ventana en el tiempo a nuestra historia país.