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¡Huasos carajo!

Guasos y rodeo pertenecen a una cultura específica, enmarcada en un territorio -dentro del Nacional- también específico.

El simple hecho de que se nos haya impuesto por ley, a gentes que vivimos en el desierto más árido del mundo, ya es indicio de que algo anda mal.

Si por ley se nos endilga una identidad y una cultura que no es nuestra... ¿de que multiculturalidad hablamos? Y ¿de que respeto a las distintas identidades?

En cuanto a la acción de esos valientes guasos, creo que constituye delito y como tal debe ser tratado.

Estos pretendidos patrones de fundos, aún creen que están sobre la ley.

Son el símbolo del centralismo que nos ahoga.

La imagen viva, impuesta por ese mismo centralismo.

Manifestar que los Comunistas, los Sionistas, los Ateos y los Homosexuales, están detrás de estos reclamos... es como para pensar que todos esos guasos son nazis.

Y muchos lo serán, pero no todos... supongo.

¡¡¡Bien por los comunistas, los sionistas, los ateos y los homosexuales!!!

Brutos o no, esos disfrazados de supuesta gente de campo (¿el simple trabajador del campo chileno, tendrá dinero, para implementarse con ese trajecito?) deben ser castigados por violar los derechos fundamentales de la protestante.

Un baldón a la Fiesta Bicentenaria, que es de todos los chilenos: Los de sombrero andaluz y los de gorro de lana.

¡Que se derogue esa ley del Rodeo!

O si no que se dicte una ley que obligue a esos huasos de opereta a celebrar el Inty Raimi y a Carnavalón y a Carnavala.

El huaso resultó ser una vergüenza nacional, en el siglo XXI.

No me gustó su acción y... no me voy a USA.

¿Y? ¡¿Que jué?!

Digo yo no má', puh.

Antonio F. Leiva Madrid.
Un Comunero de Antofagasta.