Vuelan Las Plumas: Señores, no se hagan ilusión

Vuelan Las Plumas: Señores, no se hagan ilusión

28 Noviembre 2016

Vivian Lavín se refiere al montaje "Señores, no se hagan ilusión", obra de egreso de un grupo de jóvenes actores de la carrera de Teatro de la Universidad Católica.

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Podríamos decir que se trata de un palimpsesto mediático que registra algunas declaraciones que han aparecido en los últimos meses en la prensa, radio y televisión chilena. Son frases y revelaciones de ciertas figuras que hicieron noticia que, junto a versos y otras escrituras, construyeron un texto dramático mayor y que se convirtió en la base de una obra de teatro que tuvo una breve temporada en el Teatro de la Universidad Católica.

Es un palimpsesto, porque de la misma manera que en la antigüedad se escribía una y otra vez sobre el mismo papiro, hoy pareciera que vamos borrando y reescribiendo nuestra realidad con la rapidez de las nuevas tecnologías, de las que queda un registro que promete eternidad, pero que nos sumerge en un fangoso y caótico mar de información.

La idea de tomar todo este material y darle forma dramática fue la opción que hizo un grupo de jóvenes actores para su egreso de la carrera Teatro de la Universidad Católica. Bajo la dirección de Alfredo Castro, uno de los tres directores que junto a Rodrigo Pérez y Trinidad González, trabajaron con la clase 2016 durante su último semestre académico, optaron por una frase de la ópera de Kurt Weill y Bertold Brecht Ascenso y caída de la ciudad de Mahagonny que dice: Señores, no se hagan ilusión.

Fue el mismo Alfredo Castro quien tensionó a los jóvenes con una pregunta lacerante: ¿Qué es lo que hace de Chile un país en el que no se quiera vivir? Así, indagaron en nuestras miserias, abusos, xenofobia e injusticias que registraron a partir de frases, imágenes y personajes que reflejaban esas escorias en la prensa nacional, y que luego serían transformados en textos dramáticos.

El ejercicio de tomar todo ese lenguaje que ha sido amplificado a través de los medios de comunicación para ser significado en las tablas da como resultado una experiencia que impresiona por ese indigesto pan nuestro de cada día que es la información, la que escuchada fuera de su contexto original, golpea aun mas. Al final, todo se transforma en un espejo brutal que duele en lo profundo cuando son cuando nuestros jóvenes los que nos lo muestran. Son ellos los que ponen de una vez todo el estiércol que circula y embadurna nuestro paisaje, nuestras vidas, nuestras relaciones.

Allí está la Gatita del Matinal que chilla diciendo que “la farándula es subversiva”, la misma que se autodefine como un “tótem del arte nacional”. Una figura nacida para la entretención masiva y que en la obra subvierten describiendo como “una niña que adquirió la ideología del proletariado”. Perfectamente reconocible está el joven dirigente político de la UDI que saltó a la fama cuando se filtró el audio de los gritos y agresiones que le espetaba a su polola. La respuesta de la joven es asumida por un coro de mujeres, que representan a las decenas de mujeres que mueren cada año en nuestro país producto de la violencia de sus parejas masculinas y las millares que son acosadas y violentadas cada día. Allí está también el joven que ingresó a la jaula de los leones del Zoológico del Parque Metropolitana y que dice: “Quiero ser aquél otro que había sido una vez”…

Son finalmente, los mismos jóvenes quienes nos advierten que no son testimonios alegres lo que han recogido porque estamos en un país donde los hombres amanecieron creyéndose dioses o reyes.

"s descrita como "na  jla entrenrentenciesadilla, no de neustro diario vivir. Pero a realidad con la rapidez de las nuevas tecnoSin emSi Sin embargo y contrariamente a la sombría promesa del título de esta obra de teatro llamada Señores, no se hagan ilusión, sí se abre en el espectador esa posibilidad sabiendo que esa esperanza aparece a partir de la lectura que estos jóvenes han hecho de la realidad, de una realidad en la que ellos aún no intervienen. De modo que, quizás, su participación en la construcción de un mañana que no es hoy, cambie en algo las cosas.