Los niños que nacen con problemas congénitos al corazón, son aproximadamente el 1%  de todos los recién nacidos vivos; como lo explico la Dra.  María  Ana Dorkin, cardióloga infantil de Antofagasta “si él bebe, proviene de una familia con historia clínica ligada a patologías cardíacas, lo más aconsejable, es realizar un muy buen control del embarazo y una  ecocardiografía fetal, la cual podría sugerir y / o  diagnosticar un posible defecto congénito”.

 Además, agregó la especialista, que el  control pediátrico periódico  es recomendable en un 100%, incluso debe extenderse hasta llegar a  la adolescencia por lo menos una vez al año; y en el caso que el profesional sospeche algún problema cardíaco, éste debiera al pequeño o al joven al cardiólogo infantil, para la realización de un examen más acucioso y especializado, realizando probablemente  un electrocardiograma y en algunos casos ecocardiograma  entre otros.  “Con estos exámenes  se puede determinar si el niño es portador de alguna  patología cardíaca en ese momento, pero el resultar los exámenes normales,   no garantiza que ese individuo no pueda tener, en algún momento de su vida, algún problema a futuro”, acotó.

¿Me debo preocupar si mi hijo presenta un soplo al corazón?

Aproximadamente el  60% de los niños normales y sanos, en algún momento de la vida pueden  presentar un soplo llamado inocente, que NO  representa una enfermedad  y  que NO requiere ningún tratamiento.  Por esto, es muy  importante el control pediátrico permanente del  niño, con el objetivo de que si existe algún cambio en el examen clínico o algún síntoma,  se pueda detectar a tiempo  y derivar al menor al especialista.

Obesidad y problemas al corazón

El porcentaje de niños que nacen con una enfermedad al corazón en general es bajo,  pero  lo que tenemos que evitar es que lleguen a la edad adulta con enfermedades cardíacas  adquiridas durante la infancia por mala alimentación y sedentarismo.

La obesidad, es uno de las patologías que más aquejan a los niños de nuestro país. “Los papás llegan a mi consulta, no aceptando que sus niños están obesos, solo dicen que “están gorditos o están sobrepeso”. “Esta situación es lamentable, ya que estos pequeños  no solo tienen problemas con su autoestima, sino que presentan en su gran mayoría  problemas osteoarticulares , dificultad para realizar ejercicios , pudiendo encontrarse  en el examen clínico, cifras de presión arterial elevadas para la edad del niño   y al realizarle exámenes de laboratorio, encontrar aumento de los niveles de colesterol , alteración de los niveles de insulina, etc. lo cual va a significar alto riesgo de patologías coronarias y metabólicas cuando adulto, las que se están viendo cada vez más, en edades más precoces ”, puntualizó la cardióloga infantil.

Es por esto, que la  Dra. Dorkin, sub-especialista en cardiología pediátrica, de Clínica Bupa Antofagasta, hace un llamado a los padres, a preocuparse por la salud de sus hijos, controlándolos periódicamente , dándoles una  alimentación sana ,  evitando alimentos  ricos en azucares y  grasas y por otra parte , acompañarlos ,  estimularlos e incentivarlos  a realizar deportes y vida sana, para así  contribuir a vidas más largas, sanas y felices.