Caso Fonasa y la inseguridad en el sector norte de Antofagasta

Caso Fonasa y la inseguridad en el sector norte de Antofagasta

30 Mayo 2012

El caso de la sucursal de Fonasa que dejó de recibir pago en efectivo, ha dejado en evidencia la inseguridad en la que viven algunos vecinos del sector norte de Antofagasta. Aquí los testimonios.

Nadeska Garcés >
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Una serie de asaltos a usuarios de Fonasa que concurrían a la sucursal de Nicolás Tirado a comprar bonos o pagar programas de salud obligó a la administración del lugar a dejar de recibir pago en efectivo. Una medida que desató una controversia, algunos, como el diputado Pedro Araya, reclamaban que  “esta sucursal deja en desprotección a cientos de usuarios de Fonasa, además significa el fracaso de las políticas públicas en materia de seguridad ciudadana. Decirle a los usuarios: no traigan dinero porque aquí los van a asaltar es una vergüenza”.

Otros, opinaban que era una medida desesperada de Wilson Pizarro, Director zonal norte de Fonasa, quien dijo que se habían hecho las gestiones pertinentes con el municipio y carabineros, que habían solicitado un mayor resguardo policial y de personal de la municipalidad para poder volver al antiguo sistema, pero que seguían a la espera.

En Santiago, el director nacional de Fonasa Mikel Uriarte, en una primera instancia desmintió que la medida existiera. Luego, manifestó que se abriría una investigación.

Mientras tanto, ayer el gobernador de Antofagasta Costantino Zafirópulos aseguró que a partir de hoy miércoles, se restablecerá el procedimiento normal de pago con efectivo en la sucursal de Fonasa, ubicada en el sector norte de Antofagasta.

Además declaró a SoyAntofagasta que “me reuní con el director regional Wilson Pizarro y le informé que Carabineros comprometió su presencia en todo el perímetro del sector involucrado, para resguardar la seguridad de tanto de los usuarios como de los propios funcionarios que ahí trabajan”.

INSEGURIDAD EN EL SECTOR

La situación de Fonasa no es nueva. Más allá de las cifras, un recorrido por el sector norte y una conversación con varios comerciantes de barrio, la sensación es la misma: inseguridad.

Muchos almacenes y negocios pequeños son asaltados constantemente. Y con armas de fuego. 

"Los delincuentes están cada día más violentos. Yo doy gracias a Dios porque aún no hay muertos, pero es sólo cosa de tiempo. Son los mismos que nos asaltan una y otra vez, pero nadie hace nada por detenerlos y la gente está cada día más asustada", nos cuenta la dueña de un almacén en Las Rocas.

Lo mismo opinan los trabajadores de una bencinera en plena población Bonilla. "Estamos chatos de los asaltos, antes venían con cuchillos y uno entendía que podían ser drogadictos, pero ahora asaltan con pistolas y eso asusta", cuentan.

En el sector de los condominios no es diferente. Almacenes son asaltados impunemente y los delincuentes son más osados y violentos. Más de un vecino ha sido encañonado para entregar la recaudación diaria.

Hay mucho efectivo al final del día, especialmente en los locales que recargan teléfonos, venden cigarros, reciben pagos de servicios y juegos de azar. Eso los ladrones lo saben.

Muchos piensan que si pudieran, también optarían por no recibir efectivo. 

¿Y dónde está la seguridad? ¿Hasta cuándo sigue la impunidad de los asaltantes?