La Comisión Especial de Seguridad Ciudadana del Senado, inició sus labores con un Seminario Taller con las principales autoridades competentes, ONGs y sector académico.

El Presidente de la Corte Suprema, planteó que este era un tema más político que técnico. Reconoció la necesidad de gestión, administración y coordinación y planteó el concepto de estándar cero, de no caer en la autocomplacencia y en estadísticas. Después de las presentaciones del Ministro del Interior, Poder Judicial, Fiscal Nacional, Defensor Penal, Policía de Investigaciones, Carabineros, Gendarmería, Agencia Nacional de Inteligencia, Paz Ciudadana, Centro Modelamiento Matemático de la U. de Chile, Centro de Estudios de Justicia para las Américas, Centro de Estudios de Seguridad Ciudadana y especialistas Académicos, más la discusión parlamentaria quedó en claro que el tema no se resuelve con más policía, sino que en una acción conjunta y coordinada más algunas reformas.

 El Ministro del Interior puso la clave de los anuncios del Gobierno, en que ésta estará en una participación ciudadana vinculante temprana. Lo que cambia el eje de una política equivocada de represión. Especialistas Universitarios afirmaron además que penas más altas, logran el efecto contrario.

 En nuestro centralizado país, lo que más rápido se ha regionalizado, es la delincuencia. Son los vecinos que señalan en forma clara los lugares, horas y quienes hacen o predisponen focos para el delito. Se requiere entonces más que cantidad, calidad y oportunidad. Nuestras Policías y Gendarmes están en condiciones, con un apoyo legal e institucional de reforzar su actuar, con una buena coordinación y sintonía con las organizaciones sociales de base, de actuar justamente donde se debe, en lo preventivo y en la rehabilitación. 

Poco ayudan en este sentido las condiciones carcelarias en Chile, en las cuales Gendarmería, debe lidiar y rehabilitar en condiciones muy precarias. La densificación y el traslado de reclusos a regiones, agrava aún más el problema, puesto que además llevan sus redes. Con Policías más protegidas y diversificadas en su actividad laboral, y mejor conectadas con la comunidad, se resolverá la base del problema. 

El alarmante Estudio de SENDA respecto al consumo de drogas y alcohol por jóvenes en Chile, muestra el incremento y la vulnerabilidad regional de este flagelo, Esto, tiene que resolverse con una participación oportuna, vinculante de la sociedad local y una mejor política de Estado.