Finalmente 10 de los 14 funcionarios de gendarmería, que desempeñan funciones en la cárcel de Calama, fueron formalizados ayer lunes 6 de abril, por la Fiscalía Lóína, bajo el cargo de abuso a particulares, producto de la golpiza que propinaron a un grupo de reos en julio de 2013.

De acuerdo al vídeo que se filtró a la luz pública recién el año pasado (2014) y que corresponde a una cámara de seguridad del recinto penitenciario, los funcionarios de gendarmería en un procedimiento interno hacen abuso de su poder ante los reclusos, propinando golpes que según éstos últimos no tenían justificación.

Conforme señala la Seremi de Justicia, Alejandra Pozo, en cuanto esta situación quedó al descubierto el Ministerio y Gendarmería ordenaron en forma inmediata un sumario interno, producto del cual este grupo de gendarme recibió sanciones administrativas, que implicaron la suspensión de algunos de ellos y para otros la rebaja de sus sueldos en varias proporcionados, alcanzando en algunos casos, hasta un 60%.

Asimismo, la personera pública explicó, que conscientes de la falta cometida por los funcionarios, una vez que la Fiscalía de Calama presentó la denuncia, tanto Gendarmería como el Ministerio han estado llanos a entregar todos los antecedentes necesarios para la investigación, a fin de facilitar el proceso.

Consultada en cuanto al motivo que habrían tenido los gendarmes para proceder de aquella manera, la Seremi señaló que “hay que entender que la relación que se da al interior de los recintos penitenciarios son bastante particulares, puesto por procedimientos internos los funcionarios deben realizar allanamientos, para pesquisar cualquier artefacto que pueda ser peligroso para la población penal lo que genera conflictos entre ambas partes”.

Sin embargo, agregó, que en lo absoluto eso justifica que algún funcionario abuse de su posición y proceda de manera transgresora.

Hecho aislado

Igualmente Alejandra Pozo, explicó que esta situación vivida en la cárcel de Calama, es un hecho completamente aislado, lo que se respalda que en ninguno de los informes escritos que los jueces han emitido en el último tiempo al Ministerio, se ha registrado algún antecedente que indique violencia al interior de los penales de la Región.

“Los jueces visitan las cárceles, en donde inspeccionan el normal funcionamiento de éstas, además de en algunas ocasiones otorgar audiencias a algunos reclusos. De estas visitas, ellos generan informes al Ministerio, indicando falencias detectadas a las cuales, el Ministerio debe dar una respuesta y solución. Asimismo, el Ministerio, también vigila la seguridad y orden de los recintos”, comenta.

La seremi, señala que de este lamentable hecho, de todas maneras se puede rescatar el rol activo que ha tenido gendarmería en sumariar administrativamente a los funcionarios y luego facilitar la investigación.

Como también, que a partir de esto se generaron dos medidas fundamentales, la primera de ellas es un diálogo permanente con los dirigentes gremiales de gendarmería, para que ante casos como estos, ellos se manifiesten de forma objetiva y no resguarden innecesariamente a aquellos funcionarios que han cometido falta administrativas. “Esto ha sido muy provechos, porque hasta ahora, ellos han actuado de manera consecuente y facilitando la investigación” , comenta.

La otra medida indicada por la Seremi corresponde a la creación de la Unidad de Derechos Humanos al interior de Gendarmería, con la finalidad que los funcionarios comprendan que su rol es ser custodios de personas, que si bien están privadas de libertad por faltas cometidas ante la sociedad, no significa que quedan vulnerables a ser transgredidos en sus derechos humanos. Disposición, que evalúa como un avance para la vida penitenciaria y Lajusticia en Chile.

Finalmente, Alejandra Pozo, aclara que más allá de las medidas administrativas que ya se tomaron, los funcionarios ahora serán procesados por la justicia, por lo que de ser condenados arriesgan penas según lo establecido en el código penal.

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