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Si usted pensaba que trabajar en Minera Escondida era una bendición, por los altos sueldos y beneficios, se equivocaba. Al menos esa es la impresión que los mineros en paro dan a entender, Marcelo Tapia, Vocero del Sindicato N°1 de los Trabajadores de La Escondida, denunció presiones y amenazas por parte de la minera, “la empresa hace lo que quiere en cuanto a jornada de trabajo, está violando la ley con el contrato de asistencia. Tenemos un beneficio habitacional que se entrega a algunos trabajadores, por lo que hay discriminación. Tenemos gente que llega sana y luego se enferma, enfermos profesionales que son despedidos sin ningún tipo de beneficio. La empresa llaman a nuestras casas atemorizando, es una campaña sucia, del terror, que está llevando a cabo en contra del movimiento”.

En este escenario, ayer representantes de MEL no llegaron a la cita en la Inspección del Trabajo, que había acojido la solicitud de los trabajadores para oficiar de mediadora en el conflicto. La empresa no iniciará el diálogo hasta que los mineros depongan el paro, ya que aseguran, no hay un proceso de negociación colectiva y la movilización es ilegal.

De esta forma, los trabajadores se exponen a sanciones, descuento de los días no trabajados -están en paro desde el viernes pasado a las 19.00 hrs- e incluso el despido sin derecho a indemnización. Es por eso, que hoy presentarán en tribunales un recurso de amparo y una denuncia por acciones antisindicales.

CONTRATISTAS

En tanto, el presidente de la recién conformada Federación de Trabajadores Contratistas de Minera Escondida, Jorge Marín, aclaró que su movilización va por una vereda distinta. Quieren un 50% del bono "Fiscal Year", $2.500.000, que están pidiendo los trabajadores MEL de planta. Entregaron un petitorio a la empresa ayer, y hoy, analizarán las acciones a seguir. Pese a que en días anteriores habían anunciado que se sumarían al paro, aún no hay claridad sobre eso.