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Días atrás, el ex Senador, Ministro de Estado y Presidente del PPD Sergio Bitar Chacra, hizo noticia con el lanzamiento de un nuevo libro de su creación, “Un destino común, Chile, Bolivia y Perú” [9], donde en resumen propone que Chile debería darle una salida al mar soberana  al país altiplánico, agregando que el norte chileno debería ser de beneficio para los tres países, dejando atrás los resquemores de la Guerra del Pacifico. Se trata de una opinión respetable aunque la inmensa mayoría de los chilenos rechaza categóricamente.

Uno se pregunta hasta qué extremos pueden llegar los políticos para volver al primer plano de la actualidad, que es lo que ocurre con Bitar, hace mucho alejado del primer plano de la noticia. Quiero decir que respeto su postura, pero nadie obliga a compartirla. Vamos viendo, el autor del libro peca de inocente cuando sostiene que se trata de tres países con un destino común, olvidando las acciones que por separado han mantenido y mantienen los Gobiernos de los países vecinos. Recuérdese que Bolivia sostiene que Chile no debe recibir ni un milímetro del gas que produce, mientras Perú pretende desconocer los límites marítimos con nuestro país, situación que definirá la Corte Internacional de Justicia de la Haya.

Existente un Tratado con Bolivia suscrito a comienzos del siglo XX, que no puede ser modificado unilateralmente. En consecuencia, contrario a lo que sostiene Bitar, Chile no tiene problema alguno con Bolivia, sino todo lo contrario. En consecuencia, no se trata de modificar la historia, porque eso sería un agravio para quienes combatieron durante la Guerra del Pacifico. No se trata entonces de olvidar a Prat y a los 77 de La Concepción, entre otros muchos mártires, que perdieron su vida en defensa de su Patria y su bandera.

Lo más importante frente a este absurdo, es que el autor del libro, muy suelto de cuerpo, prácticamente exige darle una salida soberana al mar a Bolivia, pero como varios otros, no dice cómo, porque supuestamente un hipotético puerto boliviano, bajo su soberanía, necesitaría caminos de acceso hacia ese país, es decir, prácticamente cortar en dos el territorio nacional. Ello es absolutamente imposible, mientras que hay otros que afirman que la supuesta salida al mar para Bolivia debería ser al norte de Arica, lo que tampoco es posible porque existe un Tratado con el Perú, que obliga a nuestro país a consultarle a ellos si eso es o no posible. Dicho en otras palabras como existe un Tratado, hay que respetarlo sin criticar a Perú por oponerse a este planteamiento.

Varios años atrás tuve la oportunidad de conocer a Sergio Bitar. Incluso, lo entrevisté en un programa radial que mantenía. En ese entonces me pareció una persona inteligente, pero al tenor de los acontecimientos actuales, creo que está equivocado y, más aún no olvidemos que quienes propugnan ceder parte del sagrado suelo patrio, están muy cerca de ser calificados como traidores a la patria. No digo que Bitar lo sea sino que su postura muy respetable, no es compartida por la inmensa mayoría del pueblo chileno. Lo que podría comprobarse, incluso con un supuesto plebiscito. La única solución a este hecho sería arrendarle o concesionarles un puerto entre Tocopilla y el Rio Loa a los bolivianos, bajo administración de ese país, como sucedió con Hong Kong, pero siempre bajo la soberanía de Chile.