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El precio del cobre cerró una vez más a la baja generando incertidumbre debido a la dependencia de Chile de este commoditie que es el principal ingreso del fisco. El retroceso de un 1 por ciento respecto del último valor trae nuevamente a colación la idea del fin del súper ciclo, que en su momento logró transar el metal rojo superando los 4 dólares la libra.

Pese a la baja, Julián Alcayaga, economista de la ONG Chile Cobre, estima que el precio no se irá en picada y que se mantendrá en torno a los tres dólares.  La disminución no solo la atribuye a la desaceleración de la economía China, que es el principal consumidor de metales del mundo, sino que también a la mayor producción que realizó Chile durante el 2013  aunque esto último sería menos influyente.

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                                     Julián Alcayaga

Pero lo que preocupa al economista es la falta de capacidad que ha tenido el Estado chileno para aprovechar de mejor forma este metal, cuyo problema sería histórico e instalado a partir de los beneficios a las empresas extranjeras para que realicen inversiones mineras junto a un fuerte lobby para perpetuar esta condición.

“El lobby del cobre que existe desde hace mediados de los años 80, se ha introducido en todas las esferas del poder que tiene que ver con la industria de la minería y, naturalmente, desde el poder ellos han realizado las leyes han cambiado las leyes para favorecer la inversión extranjera y que estas empresas se lleven el cobre sin pagar impuestos en Chile. Porque hasta el 2003 no pagaron impuestos, después han pagado por el alto precio del cobre, es cierto, pero pagan una miseria en relación a lo que deberían pagar”.

En el mismo sentido, el académico de la Universidad de Santiago y doctor en Economía, Víctor Salas Opazo manifestó que existen algunas compensaciones a la desaceleración China como una mejor proyección para la economía de Estados Unidos en 2015 o la estabilidad de Alemania que otorgaría una cuota de equilibrio a la demanda Europea.  Aunque valora que haya existido en el pasado una capacidad de ahorro y capitalización de los recursos otorgados por el cobre  mantiene  la postura de que Chile no ha sabido aprovechar la riqueza que le entrega este mineral.

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                                 Víctor Salas Opazo

“Terminamos con una tasa de royalty muy baja que no corresponde a un royalty en esencia sino más bien a una tasa sobre  las ventas, de tal forma que estamos desaprovechando esa posibilidad digamos. Todas las tasas internacionales son el doble, el triple o el cuádruple de las que nosotros estamos aplicando a las empresas mineras, de cobre en particular”.

Con una visión distinta Manuel Riesco, economista del Centro de Estudios Nacionales de Desarrollo Alternativo (CENDA) cree que el cobre está en picada y perfectamente podría llegar a bajar hasta los  2 dólares la libra, en conjunto a otros bienes como el petróleo. Para Riesco las causas  radican en las compras que realizan los bancos de los países desarrollados en épocas de crisis, momento en que a falta de inversiones empezarían a acaparar materias primas de forma especulativa. Bancos como JP Morgan y Goldman Sach tendrían más bodegas de Cobre que la misma Codelco o cualquier explotador de cobre, asegura Riesco.

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                                       Manuel Riesco

“Por ejemplo ahora el senado norteamericano acaba de denunciar que estos especuladores en materias primas hacen una cosa que llaman “el carrusel” para dilatar la venta y digamos sostener el precio para no perder dinero y ganar. Pero como pueden recibir denuncias si están acaparando lo que hacen es que se venden a sí mismos y van rotando el metal de una bodega a otra”.

Riesco agrega que además, la renta que se ha obtenido por el cobre, ha sido casi un regalo para las empresas que han venido a extraerlo y que para nacionalizar no importa la época, sino voluntad política recomendación que deja para Chile, que aún tiene recursos para aprovecharlos mejor.