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Frente al amplio respaldo hacia una de las demandas históricas del movimiento por la diversidad sexual, como es el matrimonio igualitario, parlamentarios de diferentes sectores manifestaron su compromiso para agilizar la tramitación de esta norma en el Congreso.

Además, en la visita realizada al Parlamento este miércoles, el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) solicitó que se contemple la fusión de siete proyectos relacionados al tema, que ya han sido ingresados para su discusión en el Congreso. Estos podrían ayudar a futuras modificaciones en la iniciativa sobre matrimonio igualitario que presentará el Ejecutivo, la cual podría estar lista el primer semestre de 2017.

Cabe recordar que el Gobierno y el Movilh llegaron a un acuerdo para impulsar el matrimonio igualitario, luego de la demanda presentada por el colectivo en conjunto con otras organizaciones ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos el 2012.

En tanto, para el presidente de la Fundación Iguales, Luis Larraín, esto es un signo de que los parlamentarios están tomando en cuenta lo que demanda la ciudadanía y también demuestra una voluntad de la Presidenta de cumplir con su programa.

Sin embargo, este multitudinario apoyo a la comunidad LBGT (Lesbianas, bisexuales, gays y transgénero) alertó a un grupo de diputados de la UDI, quienes enviaron una reforma constitucional que apunta a prohibir el matrimonio entre personas del mismo sexo. La moción, además, busca impedir que las parejas homosexuales puedan adoptar hijos.

El presidente de la UDI, el senador Hernán Larraín, sostuvo que el Acuerdo de Unión Civil, aprobado en 2015, es suficiente y resuelve el problema. Agregó que legislar ahora una institución paralela a la del matrimonio lo que hace es generar confusión.

El jefe del área de Derechos Humanos del Movilh, Rolando Jiménez, declaró que estas declaraciones de personeros gremialistas no le sorprenden, y no obstante confía en que, nuevamente, podrán imponerse a los obstáculos que pondrán los sectores más conservadores al avance de las reformas.

“Están perdidos, los vamos a derrotar, una vez más, como los derrotamos en su oposición a la ley antidiscriminatoria, como los derrotamos en su oposición a la derogación del artículo 365 que penalizaba las relaciones sexuales entre adultos, los vamos a derrotar tal como los derrotamos con la aprobación de la ley de Unión Civil”.

La reacción del Ejecutivo no tardó en llegar. El vocero de gobierno, Marcelo Díaz sostuvo que esta reforma constitucional presentada por el gremialismo no tiene ningún sentido. Además, puso en duda que logren el quorum necesario para aprobar la moción en el Congreso.

Por la tarde, el ex Presidente Sebastián Piñera, quien meses antes había manifestado su arrepentimiento por no aprobar dentro de su mandato el Acuerdo de Unión Civil, criticó la importancia que se le otorga a la legislación sobre matrimonio igualitario, ya que, a su juicio, antes hay que resolver otros  problemas como la delincuencia.

Las otras demandas

Si bien las dos propuestas más significativas para la comunidad LGBT en relación con la agenda valórica de la Presidenta Michelle Bachelet, el Matrimonio Igualitario y la Ley de Identidad de Género ya están siendo discutidas tanto por parlamentarios como personeros de gobierno, aún quedan demandas sin atender por los discursos oficialistas.

En abril de este año la Corporación Humanas, en conjunto con la Agrupación Lésbica Rompiendo el Silencio, Colectiva Visibles y Familia es Familia ingresaron al Senado un proyecto de ley que brinda protección de filiación de las hijas e hijos de parejas del mismo sexo.

El proyecto busca regular, reconocer y proteger los derechos de filiación de los hijos nacidos con apoyo de técnicas de fertilización asistida, derechos  para ambas madres y no únicamente, como está estipulado en la normativa vigente, de la madre que dio a luz.  También se solicitó regular el reconocimiento voluntario de maternidad a la madre que comparte la crianza del hijo que no tiene filiación determinada, y adecuar la legislación sobre adopción al nuevo estatuto familiar: el Acuerdo de Unión Civil.

Por otra parte, desde el Frente de Diversidad Sexual argumentan que dentro de los temas pendientes están las mejoras a la Ley Antidiscriminación o Ley Zamudio, promulgada en 2012.

Para Marco Becerra, vocero de Acción Gay, la normativa que se tramitó en el gobierno de Sebastián Piñera es una pésima legislación que, en la práctica, no estipula reparaciones para las víctimas y no cumple con el objetivo por el cual fue pensada: proteger a todas las personas de una discriminación arbitraría.

A propósito de las muertes en Orlando, Estados Unidos, Becerra sostuvo que es necesario que Chile promueva una ley que permita condenar los crímenes de odio.

“En Chile hay organizaciones, instituciones y personalidades con fuerte influencia en los medios de comunicación, que permanentemente están haciendo discursos de odio y que atentan contra los derechos humanos, y que también son caldo de cultivo para que fanáticos religiosos o de otro tipo, atenten contra personas de la diversidad sexual”.

En los próximos días el gobierno debe pronunciarse, nuevamente, acerca del acuerdo de matrimonio igualitario, momento en el cual deberá definir las fechas para que el documento ingrese, definitivamente, al Congreso.