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Una investigación llevada a cabo por expertos de la Universidad de Bristol (Reino Unido), determinó que tener obesidad en la juventud afecta en forma directa al corazón. El estudio indicó que la obesidad o el sobrepeso con Índices de Masa Corporal (IMC) elevados -en las personas jóvenes- aumenta la presión arterial y altera la estructura del corazón, lo que propiciaría el desarrollo de enfermedades cardiovasculares.

La investigación – publicada en la revista Circulation – contó con la participación de 3.000 personas entre los 17 y 21 años. Si bien, los resultados no probaron la relación causa efecto entre la obesidad y estas enfermedades, sí dejaron ver que un IMC elevado se asocia a un aumento de la presión, como también a la hipertrofia del ventrículo izquierdo.

Por otra parte, los autores de la investigación señalaron que los cambios que se producen en la estructura del corazón son irreversibles y se producen antes que los vasos sanguíneos del corazón queden dañados por la aterosclerosis (acumulación de placa en las arterias) o la acumulación de lípidos en sus paredes.

Cabe señalar que está demostrado que la obesidad hace más propensas a las personas a sufrir distintos tipos de cáncer, diabetes y sobretodo enfermedades del área cardiovascular, las que hoy ocupan el primer lugar como causa de muerte en el mundo y que sólo en 2015 cobraron la vida de 17,7 millones de personas.