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Decenas de profesantes se dieron cita en un de los días más solemnes para la localidad de Peine, para celebrar a su Patrono San Roque.

La jornada comenzó con una misa presidida por el Obispo de Calama, Monseñor Guillermo Vera Soto, quien manifestó su alegría por la fe que aún se cultiva en estas localidades, pidió además unión entre los pueblos, mesura al celebrar y conciencia cristiana.

En la solemnidad de la ceremonia, el obispo tuvo la oportunidad de renovar los votos matrimoniales de una pareja de abuelitos pobladores de Peine, Juana Chayle Morales y Alexis Castillo, quienes junto a sus hijos, nietos y bisnietos celebraron sus 50 años de casados, se celebró además la confirmación de algunos pobladores, dándole un toque más espiritual a la actividad.

Al compás de una Morenada, Tobas, Diablada, pobladores, turistas y la primera autoridad de la comuna, Sandra Berna Martínez, recorrieron las cercanías de la Iglesia en una procesión que demandaba mucha fe para realizarse, ya que este pueblo se ubica en el pie de un monte perteneciente a la Cordillera de los Andes, haciendo el paseo un poco más cansador.

En la oportunidad se entregó una imagen de la virgen bendecida por las monjas del Convento de Toconao a personal de la Escuela Básica de Peine. Posteriormente se realizaron las bodas, consistentes en un almuerzo que ofrecen los alfereces, organizadores de la actividad religiosa a toda la comunidad asistente a la fiesta patronal.