Sin lugar a dudas hay dos grandes ejes verticales por donde se explica en términos técnicos-pedagógicos el nulo fomento de la conciencia ciudadana participativa y socio-crítica en la formación escolar.
Por una parte la responsabilidad de las universidades y, en segundo lugar, la institucionalidad de las entidades educativas escolares, al hacer primar los derechos o intereses; ya sean estructurales-corporativos (colegios religiosos, masones, etc.), privados del profesor (profesor derechista acérrimo, comunista empedernido, concerta "buena onda", nihilista de la posmodernidad, etc.), burocráticos-administrativos (el uso del odioso uniforme escolar, el corte de pelo militar en los hombres, el corte de pelo como “señorita” de las “damas”, el cantar el "tangero" himno nacional, el cantar las baladas de María Auxiliadora “Santa y Virgen”, etc.) por sobre el derecho a los APRENDIZAJES de los/las estudiantes; que en definitiva es, en “teoría”, la función de los profesores, cual es ser FACILITADORES DEL APRENDIZAJE, no ser “ENSEÑADORES” (entiéndase enseñadores como dogmatizadores, al dictar contenidos, hacer aprender cosas de memoria –fechas, moleculas, huesos, años, grandes estatuas-personajes-, etc.).
Con respecto a la responsabilidad de las universidades, es si lugar a dudas el elemento crucial del análisis de los problemas de la educación; que no es la falta de recursos en los establecimientos –aunque no se puede desconocer que influye en algo el no tener medios audiovisuales informativos en medio de la sociedad de la información-. Es falso, sin embargo, decir que todo es culpa de los déficit de financieros en la educación, pues es echarle la culpa al "empedrado" y no a las balatas y amortiguadores del auto que producen que se rompa en definitiva el eje de la dirección y nos demos vuelta -aunque un camino con cemento o asfaltado habría ayudado un poco-; más, tarde o temprano, con o sin asfalto nos habríamos dado vuelta igual; tal como está la educación por estos días, tras la destitución de Provoste.
La pregunta que debemos hacer es; ¿Están preparados los docentes universitarios para formar profesionalmente a los futuros profesores del país?. La respuesta es un rotundo NO. identifiquemos el porqué.
En primer lugar, toda pedagogía tiene una mención (en Física, Química, Biología, Historia y Ciencias Sociales, Matemáticas, Lenguaje, Artes, etc); por lo tanto la malla curricular de estas carreras, en teoría, debería tener una proporción de ramos de Educación (Psicología, Didáctica, etc) y de Especialidad (ramos de la especialidad de la que se trate; Anatomía, Geosistemas, Bioquímica, etc). Pues bien debido a esta separación odiosa entre especialidad v/s educación; la gran mayoría de los/las docentes de especialidad, NO SON PROFESORES, es decir, no tienen preparación DIDÁCTICA para hacer clases, solo son DOCENTES, vale decir, especialistas, que los ponen en funciones de pedagogos sin serlo, para formar a los futuros profesores. Un sin razón ¿verdad?. Por lo tanto, la conclusión es lógica; LA FORMACIÓN DE LAS Y LOS PROFESORES DEL PAÍS PASA POR UN GRUPO DE ESPECIALISTAS SIN NINGUNA FORMACIÓN DIDÁCTICA Y PSICOLÓGICA.
Los docentes son solo una suerte de “insectos especializados” que están todo el día en su laboratorio, en su escritorio, en una biblioteca, en su estudio jurídico o en su oficina de finanzas, y que de pronto, toma sus cosas y se va a hacer clases a la universidad y hace clases tal como lo haría en su especialidad –por ejemplo para carreras de Ingeniería, Historia, Medicina, Bioquímica, etc- a los futuros profesores. Entonces, este especialista –insecto especializado- se transforma en el modelo, en el paradigma del futuro profesor; que lógicamente –al pasar el 80% del tiempo con estos especialistas- tenderá a repetir en el liceo, las acciones megalomaníacas, incapaces didácticamente, deficientes metodológicamente, autoritarias, etc., de estos docentes, en el ejercicio de su profesión en colegios y liceos una vez que se reciba.
Así, los/las estudiantes de los colegios, no entenderán nada, no sabrán nada y solo les quedará aprender de memoria o copiar, tal como lo hicieron sus profesores en las aulas de ingeniería o derecho más de alguna vez, pues ellos como profesores y no especialistas, poco o nada entendieron de las clases de física o anatomía en la U, que el docente especialista hizo, como si todos sus estudiantes de pedagogía, fueran estudiantes de medicina o quimica. Afortunadamente siempre hubo un amigo o amiga abogado,ingeniero o médico en formación “buena onda” que le ayudó, especialmente soplándose en las evaluaciones. Es así como el/la profesora hará clases de física imitando a su profe de cálculo, el de Historia imitando al hitorio-topo admirador de Encina y de las grandes estatuas y fechas, el de biología como el medico profe de anatomía, todos los cuales, no tenían ninguna preparación didáctica, que es la base del proceso de aprendizaje del estudiantes.
La solución que planteamos: QUE LOS DOCENTES UNIVERSITARIOS QUE HAGAN CLASES A LAS PEDAGOGÍAS, SEAN ESPECIALIZADOS OBLIGATORIAMENTE EN DIDÁCTICA Y EN PSICO-PEDAGOGÍA POR LAS UES, de lo contrario seguiremos fingiendo que aprendemos, y la educación del país se seguirá hundiendo como lo hace hoy, dejando de lado la formación cuidadana crítica en pos de una formación amnésica y consumista; herencia de un modelo descerebrado, como lo es el modelo de las exportaciones de nuestro país.