Ladrón en Misa: No tiene Perdón de Dios...

28 Septiembre 2008
En una de las misas de las 12 horas en la Catedral de Antofagasta, feligreses vimos como "un amigo de lo ajeno" no iba a hacerse "amigo de Dios", precisamente: entró, robó, arrancó, se arrepintió y se fue. Por Gloria Pulgar Sánchez
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Es el mediodía del día miércoles 24 de septiembre y todo transcurre tranquilo en la misa que a esa hora comienza en la Catedral. Es una cita a la que acude un centenar de personas todos los días, dura media hora, lo justo y lo preciso para escuchar la palabra de Dios y seguir con las actividades de la mañana.
No llega sólo gente de la tercera edad a esta misa, sino que oficinistas, estudiantes y personas que pasan en busca de un respiro, de un consuelo o de un momento de paz.
Y paz, justamente, es lo que ha faltado desde hace un tiempo. Junto con el cambio de sentido de las calles Bolívar y Sucre, nos cambió también la forma de escuchar la misa a los que acostumbramos a asistir a la misa de las 12.
¿Alguien ha pasado por la Plaza Colón al mediodía y no ha visto el taco descomunal que se forma? Bueno, esa congestión no sólo perturba a los que trabajan cerca, a los que se sientan en la plaza a tomar aire o a los conductores que intentan llegar rápido a destino, nos perturba también a quienes queremos asistir a la misa.
¿Por qué? Porque es imposible escuchar con los bocinazos que se cuelan por las puertas abiertas de la Catedral y que hacen eco en las inmensas paredes y recovecos del edificio. ¿Nadie recuerda que se trata de un lugar de reflexión? ¿Los conductores piensan que es sólo un edificio bonito en el centro? ¿Habrá que poner un letrero que diga "Mantenga el silencio"?
Recuerdo que antes uno veía a la gente persignarse cuando pasaban frente a una iglesia, pero al parecer esa costumbre se ha olvidado. No se trata de pedir que todos respeten los lugares de culto católico, si se tratara de alguna otra religión, la petición sería la misma.
Ante tanto bocinazo, duele la cabeza, da rabia y estrés. Y finalmente, la razón por la cual uno asiste a misa, se pierde.
No hay perdón de Dios...
La Catedral es un lugar abierto a todos quienes quieran ingresar. No hay un guardia que revise (ni debería haberlo), nadie pone mala cara si estás mal vestido, nadie te impide el paso.
Es cierto que en la prensa nos invaden de información sobre la delincuencia, sobre las medidas de seguridad, cifras de victimización y miles de cosas relacionadas. Y aunque uno piense que es una exageración de los medios de comunicación, los delincuentes siempre se las ingenian para encontrar la forma de aprovecharse.
Y eso pasó el miércoles pasado, en plena misa de las 12, ya nos habíamos acostumbrado más o menos, a asistir a ella y soportar los constantes bocinazos... pero lo que sucedió ese mediodía fue asombroso.
Era el momento de la consagración, cuando algunas personas cierran los ojos, se arrodillan y se concentran en el instante más importante de la eucaristía. Ese día, el momento fue interrumpido por el grito de una mujer.
¿Se imaginan un grito desesperado en medio de la misa? Y vemos a un hombre, vestido de terno, pelo corto y buen semblante, arrancar desde las primeras filas con una cartera.
Había aprovechado el instante de la consagración, para arrebatar la cartera a una de las asistentes a la misa. ¡Impresentable!
El centenar de personas que fuimos testigos del hecho, nos quedamos congelados. ¿Cómo entenderlo? Entre procesar que se trataba de un robo, en plena misa, cometido por un hombre vestido de terno, el sujeto ya se disponía a arrancar del edificio.
Afortunadamente, entre los gritos y la conmoción, el tipo botó la cartera y arrancó sin el botín. Se arrepintió...
La misa se detuvo, todos asustados pensando ¿cómo fue que pasó esto en plena misa? El sacerdote Juan Gálvez, se tomó un minuto antes de continuar y dijo que era un pecado no intervenir ante una injusticia que ocurría frente a tus ojos.
En ese instante, no supe si estar de acuerdo o diferir, porque ¿qué hacer ante un robo por sorpresa? ¿puede una señora como yo contra un delincuente? ¿desde cuándo se visten de terno?
Es hora de que se haga y hagamos algo, no puede ser que la Catedral de Antofagasta no se respete.
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Comentarios

Imagen de Jorge Llanos Morales

Me parece una inmoralidad,

Me parece una inmoralidad, pero no por el hecho de "robar en una iglesia" puesto que ese hecho ya es un acto contra el sistema social.

Si uno se pone a pensar bien sobre el tema de la delicuencia, el problema viene de raiz. Y esa raiz es la educación en general. No solo escolar, si no que también civica. Me parece que el hecho de estremecer el título con robo en una iglesia es algo exagerado. Comprendo que muchos sean cristianos o católicos, pero piensen ¿Cuánto nos robaron ellos en la antiguedad y cuantos abusos cometieron?, no sería eso también una inmoralidad mayor siendo que usaban "la palabra de dios"?. Dejo eso para pensar, hasta luego.

Imagen de Victor

No es correcto que alguien

No es correcto que alguien robe en la iglesia, ese es territorio de los curas ;).

Valores Cristianos?, pobre gente que vive convencida que por ser cristianos tienen mejor moral que el resto.

Imagen de Fotolog El Nortero

claux__ dijo en 29/09/08

claux__ dijo en 29/09/08 0:01 ?

OHHH

de todo hay en chile...como en todas partes del mundo...

hay que agradecer que vivimos "seguros" comparados con otros lugares, pero no por eso se parará este intento de luchar contra lo que evita la real convivencia.

Bendiciones.

Buen log.

Imagen de Facebook El Nortero

Los delincuentes no tienen

Los delincuentes no tienen respeto x nada y por nadie.Lamentablemente nuestra sociedad esta sin valores cristianos y morales.Una pena!!

Yasminah

Imagen de Margarita Luana Fricke Ledezma

En mi opinión la justicia y

En mi opinión la justicia y el gobierno en general debiera poner mano dura y frenar de una vez por todas la delincuencia, ya que muchas personas han sido victima de los delitos de robo, robo con violencia, homicidios,etc. Para mi la Iglesia es la Casa del Señor, de la Virgen Santísima, por lo tanto es un lugar de respeto, y de encuentro con Dios.Los delincuentes deben estar en la Cárcel y no suelto. Margarita Luana Fricke Ledezma de Antofagasta.

Imagen de VERONICA ESPINOSA SANTOS

Veo que estamos demasiado

Veo que estamos demasiado estaticos. Al tipo debieron haberlo agarrado. Ponerlo al lado del curita para que lo identifique la gente y de ahi,entregarlo a la policia. Que nos pasa???????? nos quedamos viendo la situacion y nadie se atreve a actuar. El otro dia,en una micro del transantiago,le pegaban al conductor con un palo y la gente ,principalmente los hombres, miraban. Nadie hizo nada!!!! Lamentable!!!!!!!!!