El Calentamiento de la Economía

Gran expectación ha causado en los diversos estamentos económicos, el efecto que tienen los IPC mensuales, en la marcha económica del país, considerando que cualquier aumento de la inflación influye negativamente en la disminución del poder adquisitivo, afectando notoriamente el precio de los artículos de primera necesidad y los servicios básicos, como la movilización, consumo eléctrico, gas licuado, parafina y otros insumos de vital importancia para la vida familiar.
La leche es un alimento indispensable en los hogares donde los niños necesitan las proteínas para su normal desarrollo y las madres están inquietas porque este producto se les está yendo de las manos por el alza producida en el mercado y similar situación afecta al arroz que es plato indispensable para complementar cualquier guiso y lo mismo sucede con nuestro pan, alimento insustituible en todo hogar.
El precio del barril de petróleo ha bajado considerablemente en el mercado internacional, pero, la energía eléctrica espera nuevas alzas en breve plazo.
La clase media que aún subsiste en esta escalada alcista, es la que más afectada se siente especialmente en el vasto sector de jubilados quienes reclaman cada vez más, por la subida constante en el valor de los combustibles y productos alimenticios de primera necesidad.
Esta sufrida clase media es la única que no tiene poder para negociar, no pueden obstruir las carreteras, tampoco pueden quemar y destruir buses, camiones, vitrinas, bancos ni semáforos como es habitual en otros gremios activos y organizados.
Un jubilado protestó lanzando huevos a las autoridades creyendo que eran armas convincentes para hacer cambiar las opiniones y los lanzaba como proyectiles pensando que estos ovoides iban a sensibilizar a los administradores del erario nacional y lograría con esa acción de protesta, el ansiado aumento a sus escuálidas rentas.
Escuchamos a destacados economistas manifestar que la inflación es el aumento sostenido y generalizado de los precios y de bienes y servicios, lo cual incide negativamente en el ingreso mensual de los trabajadores afectando la estabilidad familiar producto de influencias externas internacionales.
La depreciación de nuestra moneda en relación al dólar estadounidense, el euro de la comunidad europea y el yen japonés, están influyendo en el mercado de productos importados, siendo perjudicial para nuestra economía y ese efecto lapidario lo estamos sintiendo a diario.
La economía está en un período de efervescencia, las autoridades preocupadas en evitar un colapso financiero y los consumidores expectantes ante la incertidumbre.
Foto: chile360
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