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Pregúintenle a un niño de siete años quien es Arturo Prat y les dirá quién es. Eso es ser grande. Todos alguna vez en nuestras vidas hemos admirado a algún heroe y el a servido para dar a la patria unidad detrás de la imagen de la lucha y de no arriar la bandera. Creo que el chileno más grande es aquel que tiene más aceptación y a la vez menos rechazo. Si lo hubieran hecho así Allende no podría haber llegado ni al noveno lugar.