Una de las cosas de porqué la gente siente un cierto rechazo a los políticos, es por la evidente hipocresía de los mismos cuando se tienen que referir a temas que ellos creen que potencialmente los pueden afectar: ejemplo el cuoteo, del que Carlos Peña señala -en El Mercurio del domingo 3 de mayo- muy didacticamente que es una obviedad que exista esta práctica. Pero no, están con el agua al cuello y niegan, y por el otro lado, más hipócritas aún, señalan que en un eventual gobierno no incurrirían en esas prácticas. ¡Falso!, lo harían igual porque el cuoteo, aparte de ser indisoluble de la política, es una actitud arraigada en nuestra idiosincracia aún subdesarrollada en estos temas culturales. Si el amiguismo, el compadrazgo, el pituto, el cuoteo son parientes en el tema y vienen desde muchos años atrás.
Ahora, las expresiones de Francisco Vidal, son fieles a su estilo agudo honesto, asertivo e irónico, que no le gusta a la derecha porque los desenmascara, pero que en esta ocasión lo respaldan para aprovechar politiqueramente la honestidad del actual ministro de defensa. Éste, en realidad va un paso más adelante que la mayoría de los políticos y su estilo va hacia la transparencia al reconocer errores y no negarlos a "la chilena".
En cuanto a las faltas, irregularidades o delitos que pudiesen cometer los cuoteados, bueno hay que aplicarles la ley, como a cualquier chileno. Nadie quiere tener a personas que desprestigien el gremio, sector, club, partido o lo que fuere.
Una de las cosas de porqué
Una de las cosas de porqué la gente siente un cierto rechazo a los políticos, es por la evidente hipocresía de los mismos cuando se tienen que referir a temas que ellos creen que potencialmente los pueden afectar: ejemplo el cuoteo, del que Carlos Peña señala -en El Mercurio del domingo 3 de mayo- muy didacticamente que es una obviedad que exista esta práctica. Pero no, están con el agua al cuello y niegan, y por el otro lado, más hipócritas aún, señalan que en un eventual gobierno no incurrirían en esas prácticas. ¡Falso!, lo harían igual porque el cuoteo, aparte de ser indisoluble de la política, es una actitud arraigada en nuestra idiosincracia aún subdesarrollada en estos temas culturales. Si el amiguismo, el compadrazgo, el pituto, el cuoteo son parientes en el tema y vienen desde muchos años atrás.
Ahora, las expresiones de Francisco Vidal, son fieles a su estilo agudo honesto, asertivo e irónico, que no le gusta a la derecha porque los desenmascara, pero que en esta ocasión lo respaldan para aprovechar politiqueramente la honestidad del actual ministro de defensa. Éste, en realidad va un paso más adelante que la mayoría de los políticos y su estilo va hacia la transparencia al reconocer errores y no negarlos a "la chilena".
En cuanto a las faltas, irregularidades o delitos que pudiesen cometer los cuoteados, bueno hay que aplicarles la ley, como a cualquier chileno. Nadie quiere tener a personas que desprestigien el gremio, sector, club, partido o lo que fuere.
http://mezaosvaldo.blogspot.com