Santiago no es Chile: encontremos Un Nuevo Equilibrio

Santiago no es Chile: encontremos Un Nuevo Equilibrio

21 Diciembre 2020

En Un Nuevo Equilibrio queremos poner nuestro foco fuera de Santiago, para descentralizar las visiones, problemáticas y soluciones y que entre todos comencemos a abrir nuevas oportunidades.

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Hace algunos meses un grupo de 19 directores y fundadores de compañías dimos forma a una plataforma donde pudimos canalizar las ganas de co-construir una nueva hoja de ruta para el hacer empresa y su relación con la ciudadanía, entendiendo los aciertos y los temas pendientes que detectamos en la evolución de la que todos hemos sido testigos.

Sin embargo, nosotros no somos suficientes. Por esa razón, queremos abrir esta invitación a cualquier empresario y emprendedor que quiera asumir un rol activo en el proceso político, económico y social que vive el país. Juntos debemos ser parte de las soluciones que requieren los relevantes desafíos que tendrán las compañías del futuro, que tienen que ser abordados en base al diálogo y propiciar la legítima vinculación de la empresa con la evolución institucional del país.

El equilibrio es una delgada línea roja, entre un lado y otro, entre los aciertos y los errores, entre la pasión y la racionalidad, En nuestro país, frente a los últimos sucesos, entramos en una nueva etapa en la que serán necesarios ajustes y cambios para alcanzar dicho punto.

En Un Nuevo Equilibrio queremos poner nuestro foco fuera de Santiago, para descentralizar las visiones, problemáticas y soluciones y que entre todos comencemos a abrir nuevas oportunidades, dando espacio a voces que no siempre son escuchadas y que permitan conocer lo que pasa en todos los territorios. Porque Santiago no es Chile ni nuestra realidad tampoco. Soy testigo de esta situación al estar viviendo en La Araucanía andina y al recorrer cientos de rincones de nuestro sur de Chile.

El proceso de descentralización es una oportunidad para un desarrollo integral y una necesidad latente para tantas zonas del país. Esta conversación política, necesaria y urgente, nos debe ayudar a reorientar el rol empresarial transversalmente. De esta forma, podremos reforzar y difundir las iniciativas económicas que surgen desde las regiones, replicar y escalar aquellas que contribuyen y subsanar las brechas que no contribuyen al Chile que queremos construir en conjunto. Tenemos un honesto afán colaborativo que quiere ser un aporte.

Hablar de conectividad, educación de calidad, oferta hospitalaria, competencia y diversidad de productos y servicios, entre otros, tiene dos mundos paralelos: el sector oriente de Santiago y algunas capitales regionales frente al resto del país. Trabajar para acercar estos paralelos demanda una voz de las zonas menos favorecidas que pongan los temas en la mesa.

Por eso, entre otros aspectos es vital ampliar la cobertura del actual sistema de innovación, sumando a otras regiones no sólo en proyectos de financiamiento, sino también en el acceso a expertos, redes de negocio y consejeros de alto nivel.

Para que esto sea posible necesitamos escuchar nuevas voces, entender sus realidades y desafíos, para que entre todos pensemos el Chile que viene. Estamos seguros de que el rol de los emprendedores en las distintas regiones es vital para que emparejemos la cancha y entre todos construyamos las bases para que juntos avancemos al siguiente nivel.

Por Paulo Carrasco, integrante y co-fundador de Un Nuevo Equilibrio

Paulo Carrasco

Integrante y co-fundador de Un Nuevo Equilibrio