No hay Reforma sin dignidad docente

25 Noviembre 2014

Tenemos a miles de alumnos sin clases en todo el país, a cientos de profesores movilizados, y a un ministro que guarda silencio ante este triste panorama en nuestra educación.

Diputada Paulin... >
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Un estudio desarrollado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) encuestó a mas mil docentes de 24 países de la OCDE y a una decena más de países externos, obteniendo como resultado que trabajaban en promedio 38 horas semanales, las cuales estaban repartidas en; 19 horas lectivas (haciendo clases), 7 horas de planificación para la preparación de las clases, 4 para corrección y 2 horas de gestión escolar, destinada a atención de padres y actividades extraescolares.

Esa realidad se contrapone a nuestro país, donde nuestros docentes trabajan en promedio 30 horas, de las cuales 27 son lectivas. Dejándolos sin el tiempo suficiente para la preparación de sus respectivas materias. Y así nos preguntamos ¿Por qué no tenemos calidad en nuestra educación?

Y este es uno de los 5 puntos que los docentes están exigiendo al ministerio para deponer las movilizaciones.

Estos puntos están directamente relacionados con las condiciones laborales de nuestro profesorado.

En primer lugar, exigen Titularidad Docente Inmediata. Hoy los profesores son contratados fuera de la ley teniendo contratos a plazo fijo. Aprovechando vacíos legales que les restan beneficios. Un profesor puede ser contratado de marzo a diciembre o de marzo a febrero. Pero al renovar su contrato de trabajo para el año siguiente, no lo hacen continuo, perdiendo antigüedad laboral y beneficios. Adicionalmente, pueden pasar años sin poder acceder al contrato indefinido, cuando nuestra legislación indica que al tercer contrato consecutivo se debe pasar inmediatamente al indefinido.

Otro de los puntos que exigen es el aumento del Valor hora docente, porque nuestros profesores son los únicos profesionales en el mundo entero que trabajan un mes, pero les pagan sólo una semana. Para qué hablar de la famosa deuda histórica, que sigue arrastrándose en los años, y  tenemos docentes que han muerto a la espera de ella.

Y ante todo este panorama, el gobierno insiste en centrar sus reformas en comprar infraestructura de colegios subvencionados, cuando los protagonistas de la educación viven estas condiciones laborales.

Hasta cuándo postergaremos a los verdaderos actores de la educación por privilegiar ideologías y trajes a la medida de este gobierno.  El Ministro será interpelado no precisamente por su buena gestión, y el gobierno debiera empezar a cuestionarse este movimiento como una de las tantas señales que ha dado la ciudadanía respecto a su reforma.