Capacitar a jóvenes talentos en el desarrollo de iniciativas sustentables es el principal objetivo de la incorporación de dos estudiantes tocopillanos en el proyecto de Consorcio DesertBioenergy, que lidera la empresa E-CL. La organización actualmente  desarrolla una planta piloto para generar biocombustibles de segunda generación a partir de microalgas.

Felipe Alcaya González (17 años) y Axel Godoy (18 años) son alumnos del liceo Politécnico Diego Portales Palazuelo y actualmente se capacitan en la Universidad de Antofagasta para aprender a operar las instalaciones de este innovador proyecto.

El gerente del Consorcio DesertBioenergy, Rodrigo Benavides, afirmó que “estamos muy contentos de haber integrado al proyecto a dos estudiantes de Tocopilla. Creemos que la zona necesita de profesionales capacitados y competentes, por ello convocamos a los jóvenes del liceo Politécnico, para que puedan aprender y conocer otros campos de la industria, como la investigación y la innovación, además de integrar a la comunidad de Tocopilla a nuestro proyecto”.

La planta piloto de DesertBioenergy cuenta con laboratorios  de análisis, cultivos internos y externos, además de piscinas de cultivo y procesadoras. Todas esas instalaciones podrán ser manejadas por los estudiantes, una vez que finalicen su período de capacitación.

“Para mí es una oportunidad de vida que cuando me la propusieron me sonó muy lejana, pero atractiva a la vez. Yo investigué acerca del proyecto y me apasionó el tema. Estoy muy agradecido de la Directora del Politécnico, por haber pensado en mí y de la empresa E-CL que me da esta posibilidad de ser el primero junto a mi compañero en trabajar en este proyecto tan innovador. Mi sueño es quedarme trabajando en la planta y profesionalizarme en el tema”, manifestó el estudiante Axel Godoy.

Generación de biocombustible en Tocopilla

Para su producción, la planta de cultivos de microalgas reutilizará parte del CO2 del proceso de la central Tocopilla de E-CL. La participante del Consorcio DesertBioenergy y Directora de uno de los programas de la planta piloto, Jazmín Bazaes, prevé que el proyecto actualmente en construcción sea inaugurado durante el primer semestre de este año. “Nuestro desafío es poner en marcha  la planta en Tocopilla este primer semestre y a finales de este año cumplir nuestra primera meta de tener un primer módulo de  43 metros cúbicos. Para eso contaremos con el apoyo de los chicos de Tocopilla, que se han adaptado a la perfección y con mucha motivación al proyecto”.

El consorcio DesertBioenergy se formó en septiembre del año 2010 y está conformado tanto por empresas privadas como por universidades prestigiosas en este campo de la investigación, destacando E-CL (41%), la Universidad de Antofagasta (31%), Productora de Algas Marinas (12%), Universidad de la Frontera (11%) y Molinera Gorbea (5%).

Para E-CL, esta iniciativa se enmarca dentro de los focos estratégicos de desarrollo sostenible definidos por la empresa, que apuntan a generar polos de desarrollo alrededor de sus plantas, empleo local y fortalecer el desarrollo económico de las comunas donde opera. Este proyecto iniciativa se suma a la iniciativa de GNE (gas natural vehicular), inaugurada a finales del año pasado en Tocopilla que conforman el Eco-Sistema Industrial de E-CL.