Un momento de pasión le puede costar hasta cuatro años de cárcel a un hombre de 39 años, identificado como Carlos Quijada-Lara. El sujeto se declaró culpable ante la Corte de Coronado Springs, EE.UU., de haber tenido sexo con otro hombre en su propio departamento.

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¿Dónde está el problema? Resulta que Quijada-Lara había arrendado dicho inmueble a la pareja de recién casados, Logan Pierce y Mikael DiGiulio.

CÁRCEL

Además de la posibilidad de ir a la cárcel, el fogoso arrendatario arriesga una multa de hasta 100.000 dólares de multa.

Así lo consignó Infobae, medio que precisó que un día de noviembre Quijada-Lara sintió la necesidad de tener sexo con otro sujeto, pero no tenía lugar. Sin pensar mucho en las consecuencias consideró que ocupar el apartamento recientemente arrendado –mientras los actuales moradores se encontraban trabajando- sería una buena idea.

Lo que no sabía, es que los inquilinos habían montado un sistema de cámaras de seguridad en la morada, a objeto de protegerlo de potenciales intrusos.

La mujer del matrimonio recibió una notificación de la aplicación (App), debido a extraños movimientos captados al interior del dormitorio del inmueble. Desplegó las imágenes y no lo podía creer. "Cerré el programa y lo reinicié porque no podía creer que eso estuviera ocurriendo en nuestra cama", contó Pierce.

La publicación señaló que al terminar, la pareja de Quijada-Lara se limpió sus genitales con el vestido de bodas se DiGiulio.

La pareja –que abandonó el departamento inmediatamente- denunció el ilícito y, producto de ello, el hombre de 39 años enfrenta un complicado escenario judicial.