Investigadores determinan origen del polvo contaminante presente en la zona central de Antofagasta

El principal resultado de un estudio realizado por un equipo de investigación multidisciplinario de científicos de la Universidad de Antofagasta (UA) y de otras instituciones nacionales es que el polvo negro -visible en las calles, casas y edificios del sector central de la ciudad- y algunos de los metales que contiene, se originan en el Puerto de Antofagasta, es decir, es un producto de la actividad del hombre.

A través de una declaración pública, la casa de estudios señaló que el equipo fue dirigido por la Dra. en Ciencias mención Geología y académica de la Universidad Austral, Joseline Tapia y participaron los doctores Cristina Dorador, Jorge Valdes, Rodrigo Orrego y Chris Harrod de la Universidad de Antofagasta, además de los profesionales Aliro Bolados y Andrei Tchernitchin del Colegio Médico.

INVESTIGACIÓN

Esta investigación tuvo como origen la base geológica de la ciudad y las muestras de polvo negro que fueron analizadas por distintas entidades (Colegio Médico e ISP), y un ensayo de biodisponibilidad. 

“Para interpretar y analizar la variabilidad espacial y las posibles fuentes de contaminación, se estudiaron datos existentes de la geoquímica de rocas del basamento y del suelo de la ciudad, así como también datos de polvo de dominio público. Adicionalmente, se realizó un ensayo de bioaccesibilidad del polvo y se calcularon el consumo diario químico (chemical daily intake) y el índice de peligrosidad (hazard index) en las cercanías del puerto”, señala el estudio respecto a la metodología utilizada.

CONCLUSIÓN

Respecto a la presencia de los elementos en el polvo, tales como bario, cobalto, cromo, manganeso, níquel y vanadio, su origen podría relacionarse a rocas intrusivas, volcánicas, metamórficas, diques o suelos presentes en la ciudad, es decir, su concentración en polvo se puede explicar por la geología de la ciudad de Antofagasta.

Sin embargo, las concentraciones de arsénico, cadmio, cobre, molibdeno, plomo y zinc “no se producen en dichos afloramientos de rocas, por lo tanto, son considerados contaminantes antropogénicos (producto de la actividad humana)”.

COMPAÑÍA

Por su parte, según consigna El Mercurio de Antofagasta, desde la compañía señalaron que el puerto funciona hoy en la ciudad con estándares muy superiores a los que impleamentaba hace 10 años.

Por otra parte, añadió la publicación, fuentes ligadas a la Empresa Portuaria de Antofagasta (EPA) enfatizaron que no habría nada nuevo en este estudio, y que se trataba de información conocida y publicitada con anterioridad. 

Por último, aseguraron al matutino que la investigación no reconocería los avances implementados en materia de transporte durante los últimos años, tales como "la implementación de contenedores de volteo, operación de galpones presurizados y el mismo Acuerdo de Producción Limpia, entre otros".