Tremenda conjunción entre comunidad y empresa privada marcó la semana en Antofagasta

04 Diciembre 2020

Espero no se haga costumbre en nuestra ciudad, ese antiguo refrán popular: vestirse con ropa ajena.

Fabián Ossandón >
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Fabián Ossandón Briceño - Creador Antofa Segura.

Esta, la primera semana del último mes del año, ocurrió un hecho importantísimo, el cierre del gran basural del sector, Condominio Parque San Marcos en nuestra ciudad.

El problema que cargaban hace mucho tiempo los vecinos del sector, nunca fue realmente tomado en cuenta, nunca hubo una respuesta concreta ¿Hasta cuándo? Hasta que hicieron la denuncia en nuestra fundación, en el marco de nuestra campaña de concientización ambiental, los escuchamos y fuimos al sector con medios de comunicación, así es, salió en TV, ¡se visibilizó! Levantamos la alfombra, donde está eso que no se quiere ver.

 Y ¿qué pasó? En menos de 24 horas, empezaron las limpiezas y con ello, las promesas. La máxima autoridad comunal, autoridades de gobierno y hasta un diputado fueron a limpiar y a repudiar el actuar de las personas que depositan residuos allí.

En ese punto, comparto el repudio, creo que falta educación, falta conocimiento de la existencia de la ordenanza municipal que multa a quien sea sorprendido botando basura en lugares no habilitados para ello. Por eso, con el cierre del basural, lanzamos oficialmente la campaña:  Antofagasta NO es tu basurero, con el apoyo de las juntas vecinales y la comunidad organizada y preocupada por su entorno. En la que nos encargaremos de educar y concientizar a la comunidad sobre el correcto manejo de los residuos, no nos corresponde, es verdad, pero alguien debe hacerse cargo, alguien debe hacer lo que no se hace sin TV.

CIERRE DEL BASURAL

El cierre del basural y sólo por aclarar un poco las cosas, fue exclusiva gestión del presidente del condominio Parque San Marcos, quien contactó a la empresa privada, en este caso a la constructora ACL, quienes amablemente y en un acto netamente de ayuda a la ciudad, accedieron a cerrar los diez accesos al basural, con pretiles, todo de manera gratuita. Notable apoyo y conjunción de la empresa privada y la comunidad organizada.

Nosotros como fundación, ideamos el cierre, lo que dio inicio al trabajo colaborativo, en el que nos tocó asesorar y tramitar el permiso con la Seremi de Medio Ambiente, quienes también accedieron rápidamente a dicha gestión.

Aclaro estos puntos y detallo los sucesos, no, en un afán novelesco, más bien, porque quiero destacar la unión, voluntad, preocupación y compromiso por su entorno, demostrado por los involucrados, a quienes no les correspondía hacerse cargo, pero lo hicieron y eso es valorable. La comunidad está luchando por su bienestar, por tener una mejor calidad de vida. Lo está haciendo sola, sin la autoridad de respaldo y eso merece un tremendo reconocimiento para ellos, y un mea culpa a los ausentes.

Limpiar y sólo limpiar, sin cerrar el basural, eran sólo medidas paliativas y en este caso, como en muchos otros, se necesitaba una solución de raíz.

Entonces, aclaradas las participaciones y ausencias, en esta historia con final feliz, espero no se haga costumbre en nuestra ciudad, ese antiguo refrán popular: vestirse con ropa ajena.